PANDEMIA Y AISLAMIENTO EN RESIDENCIAS DE LARGA ESTADÍA.

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Durante siete meses, estuvieron suspendidas las visitas de familiares a los adultos mayores que se encuentran en casas de reposo. Adicionalmente, tampoco era posible que use produjeran nuevas internaciones.

Afortunadamente, las autoridades han resuelto, la semana pasada, autorizar dos visitas semanales permitiendo de esa manera que las personas mayores que se encuentran internadas pueden recuperar el contacto con sus seres queridos y, también, que sea posible internar a una persona.

Sin duda, la medida obedecía a una realidad por cuanto las estadísticas indican que en esas residencias ha habido una alta tasa de mortalidad en virtud de la fragilidad de las personas internadas. Pero, a la vez, es sabido que el aislamiento y la carencia de contacto afectivo conspiran muy fuertemente contra la salud y el bienestar. Por ello parece razonable y adecuado que se produzca esta flexibilización en beneficio de la salud mental y afectiva de las personas internadas.

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